Pocas cosas en la vida nos hacen sentir tantas emociones como la música. Escuchamos unos acordes o un ritmo y automáticamente algo se activa en nuestro interior. Empezamos a vibrar. El ritmo nos arrastra y nos transporta a un mundo de sensaciones en el que, dependiendo del momento y la canción, nos invade la felicidad, la tristeza, la euforia, la melancolía o la ilusión.
Y la mayor ilusión para la gente que forma Moverground, empresa de producción, management y comunicación especializada en eventos musicales, es que con su trabajo podamos disfrutar de conciertos y eventos musicales que se conviertan en experiencias inolvidables.
El diseño de su nueva imagen busca representar la idea de que la vida es ritmo y la simbiosis tan especial que existe entre música y sentimientos.